Inicio Noticias de la Iglesia Espiritualidad Liturgia Biblia Conoce y defiende tu fe
Historia de la Iglesia Las Vidas de los Santos Lecturas de la Santa Misa María Radio Catedral Libros

PUBLICIDAD

Espiritualidad

¡Tarde te amé!



¡Tarde te amé,
Hermosura tan antigua y tan nueva
tarde te amé!

Y tú estabas dentro de mí y yo afuera,
y así por fuera te buscaba;
y, deforme como era, me lanzaba
sobre estas cosas hermosas que tú creaste.

Tú estabas conmigo, mas yo no estaba contigo.
Reteníanme lejos de ti aquellas cosas que,
si no estuviesen en ti, no existirían.

Me llamaste y clamaste, y quebrantaste mi sordera;
brillaste y resplandeciste, y curaste mi ceguera;
exhalaste tu perfume, y lo aspiré, y ahora te anhelo;
gusté de ti, y ahora siento hambre y sed de ti;
me tocaste, y deseé con ansia la paz que procede de ti.

Del libro de las Confesiones de san Agustín